Descripción general

https://es.wikipedia.org/wiki/Allium_sativum

Rotación

En ningún caso deben plantarse ajos detrás de ajos, cebollas o cualquier especie perteneciente a la familia Liliaceae. Tampoco es recomendable cultivar ajos después de remolacha, alfalfa, guisantes, judías, habas y espinacas. Los cultivos precedentes al ajo que se consideran más adecuados son: patata, lechuga, col y pimiento.

Clima

No es una planta muy exigente en clima, si bien en los climas mediterráneos y templados tiene un su crecimiento es óptimo. Cultivados en climas fríos se obtienen ajos con un sabor más picante. Soporta bien las bajas temperaturas desde la plantación hasta que la planta tiene 2-3 hojas. Las temperaturas nocturnas por debajo de 16ºC ayudan al buen crecimiento. A medida que se desarrolla se muestra más tolerante a altas temperaturas siempre que tenga humedad en el suelo.

Suelo

El ajo se adapta muy bien a la mayoría de suelos a condición de que tengan un buen drenaje y no sean excesivamente húmedos. Agradece que los suelos contengan bastante materia orgánica bien descompuesta y puede desarrollarse bien en suelos arcillosos (pesados) a condición de que no se encharquen.

Siembra

El ajo se siembra directamente en el terreno de cultivo. Se siembran los “dientes de ajo”. Tradicionalmente la siembra se realiza entre los meses de noviembre y diciembre, aunque también es posible realizar siembras en octubre y hasta comienzos de febrero. Previo a la siembra, el terreno de cultivo se preparará con una labor profunda seguida de labores superficiales de preparación del lecho de siembra; no es necesario que la tierra quede muy desmenuzada. Los aportes de estiércol descompuesto se realizarán con las labores profundas junto con algo de abono si se trata de suelos pobres o recién cultivados. Para la siembra es necesario que la tierra se encuentre en un buen estado de humedad, evitando realizarla con demasiada humedad. Por la época del año en la que se realiza no es habitual realizar riegos en el momento de la siembra. Para la siembra se deben seleccionar dientes sanos, grandes y bien constituidos: los dientes más gruesos de la parte exterior de la cabeza de ajo descartando los de la zona central de la misma. Si la plantación se va a realizar en bancales, la siembra se realiza en filas separadas unos 20-25 cm. Para ello se realizarán surcos con una profundidad de unos 3-5 cm. En el fondo de cada surco se colocarán los dientes separados a una distancia de entre 15 y 20 cm. A la hora de sembrarlos es importante que los dientes queden con la punta hacia arriba. A continuación, se rastrillará para enterrar los ajos en el fondo del surco. Si el cultivo va a ocupar una superficie de cierto tamaño la plantación se puede realizar en caballones de unos 50 cm de ancho sobre los que se disponen líneas dobles separadas 20 a 25 cm, con los dientes colocados en las líneas cada 15 a 20 cm. Esta forma de cultivar es adecuada para el riego por surcos. Si la temperatura no es muy fría al mes de la siembra los ajos tendrán entre 2 y 3 hojas. Si lo que se desea producir ajos tiernos se siembran cabezas de ajos enteras en filas, de esta manera se obtendrán ramilletes de plantas. La separación entre las cabezas sembradas en cada fila será de unos 20 cm y las filas se separarán entre 20 y 25 cm.

Transplante

Cuidados

Riego: No es un cultivo exigente en riegos, así en los lugares de clima húmedo no es necesario regarlos. En secanos rigurosos es frecuente dar 2 o 3 riegos. Y nunca se riega al final del cultivo. Escardas: En primavera suele ser necesario realizar 2 o 3 labores de escarda que airearán el suelo y a su vez ayudarán a controlar las malas hierbas. Entre finales de mayo y junio se debe realizar la eliminación del escapo floral para evitar que se produzca la “subida” a flor y destinar toda la energía y recursos de las plantas a la formación y engorde de la cabeza. A partir de esta labor los riegos deben ser eliminados o muy restringidos.

Plagas/Enfermedades

Consultar la guía de gestión integrada de plagas – liliáceas. https://www.mapa.gob.es/es/agricultura/temas/sanidad-vegetal/guiagip-liliaceasprotegida_tcm30-434394.pdf

Recolección

La recolección se inicia cuando el tallo comienza a secarse, lo que suele ocurrir entre principios de junio y julio para las siembras de noviembre a diciembre. Se arranca la planta con ayuda de alguna azadilla o similar teniendo cuidado de no dañar la cabeza. Una vez arrancados del suelo se dejan secar en el terreno un par de días antes de ser retirados para su almacenamiento una vez eliminadas las raíces (desbarbado). Los ajos frescos se recolectan a principio de primavera cuando las plantitas alcanzan una altura cercana a los 25 cm y un grosor algo superior al de un lapicero. Se extraen juntos del suelo los obtenidos de una cabeza ayudados de una azadilla. A continuación, se separan, se eliminan los restos de la cabeza que se sembró se y lavan."

Almacenamiento

Los ajos, una vez secos, se pueden almacenar en lugares frescos y ventilados. Si las condiciones de almacenamiento son adecuadas, las cabezas de ajo pueden durar más de 10 meses. Las modalidades de almacenamiento más habituales son: + Como cabezas sueltas, de las que se ha cortado el tallo seco y se guardan en cajas o bolsas de malla. + Como ramilletes de ajos que se atan por el tallo y que se cuelgan en el almacén. + Como trenzas, en los que los tallos de los ajos son trenzados quedando las cabezas en dos hileras pareadas y se cuelgan en el almacén. Los ajos frescos deben guardarse en frigorífico para ser consumidos como verdura fresca lo antes posible."